Siete familias afectadas por el incendio de Campanar piden quedarse en un piso social del Ayuntamiento

Han pasado seis meses del incendio declarado en dos torres de edificios en Campanar (Valencia) que quemó su vivienda. Salvaron la vida, pero se quedaron sin nada. Siete de las familias afectadas siguen sin haber encontrado un lugar donde volver a empezar, motivo por el que no han abandonado la vivienda que el Ayuntamiento de Valencia dispuso para ellas de forma gratuita en el barrio de Safranar.

La alcaldesa de Valencia, María José Catalá, ha mantenido una reunión con el concejal de Urbanismo, Juan Giner, la concejala de Servicios Sociales, Marta Torrado, y técnicos municipales para activar protocolos para estas familias.

De momento, se está estudiando su solicitud de informe de vulnerabilidad y en el registro de demandantes de vivienda. "Hay casuísticas diversas que vamos a analizar con mucho cariño y con mucho detalle".

De las 99 familias que se alojaron en este edificio tras el incendio 92 han dejado ya las viviendas. A su vez, se entregarán las primeras llaves de los nuevos inquilinos demandantes de alquiler asequible a las primeras 22 familias.

Catalá ha transmitido un mensaje de apoyo y esperanza a los inquilinos y propietarios que han estado durante medio año en Safranar. "Son ejemplo de resistencia. Han tenido un comportamiento ejemplar y el Ayuntamiento siempre los llevará en el corazón". También ha agradecido a las familias afectadas y a las asociaciones que "hayan abordado este itinerario con el Ayuntamiento. Han cumplido y los que quedan tienen una situación que requiere un análisis más profundo de los técnicos municipales".

El edificio de Safranar, con 131 viviendas, fue adquirido en julio por el gobierno municipal por 20 millones de euros, para dar la respuesta a la lista de demandantes de vivienda de alquiler accesible para mayores de 65 años y menores de 35 años, y la semana que viene empezarán a entrar los nuevos inquilinos.