Aerolíneas

Iberia no espera pagar mucho más de los 500 millones ya pactados si al final compra Air Europa

La aerolínea gana 246 millones en el tercer trimestre y casi iguala los resultados previos a la pandemia

Iberia se ha convertido en una aerolínea pionera en la compensación de emisiones de CO2
Iberia se ha convertido en una aerolínea pionera en la compensación de emisiones de CO2CIPRI PASTRANO DELGADOLa Razón

Iberia no espera pagar mucho más de los 500 millones de euros que ya había pactado con Globalia si finalmente adquiere Air Europa. A tres meses vista de que venza el periodo de exclusividad que IAG, matriz de Iberia, pactó con Globalia para negociar la compra de Air Europa tras la ruptura en diciembre del año pasado del acuerdo previo que tenían para cerrar la operación, el presidente de la aerolínea española, Javier Sánchez-Prieto, ha explicado que “no existe una diferencia fundamental respecto a las condiciones que se han ido acordando en sucesivos acuerdos. No esperaría grandes sorpresas en términos económicos si llegamos a un acuerdo”, según ha asegurado en un encuentro informativo tras la presentación de la nueva generación de A350 que ha recibido la compañía.

Tras alcanzar a finales de 2019 un acuerdo inicial para la venta de Air Europa a Iberia por 1.000 millones de euros, ambas compañías reajustaron el precio tras la pandemia y lo dejaron en 500 millones de euros. Sin embargo, a finales del año pasado, ambas compañías aparcaron este nuevo pacto justo antes de que la Comisión Europea lo tumbase por su temor a que la operación redujese la competencia en determinadas rutas, sobre todo en Latinoamérica. IAG cambió entonces de estrategia. Acordó en marzo conceder un préstamo participativo de 100 millones de euros a Globalia. A cambio, el conglomerado anglo-español se aseguró un año de negociación en exclusiva para hacerse con la aerolínea del grupo fundado por Juan José Hidalgo. IAG convirtió en agosto pasado el citado préstamo en una participación del 20% de Air Europa.

Ahora que se acerca la fecha límite de ese plazo, y aunque IAG daba por hecho que tendría que renegociar el precio, Sánchez-Prieto cree que “el valor es lo que valen los futuros flujos de caja menos la deuda que uno tiene”. Y, en este sentido, ha recordado que la deuda de Air Europa creció de forma sustancial durante la pandemia. Sólo al Estado, por el rescate que la concedió la SEPI y los créditos ICO adeuda más de 600 millones de euros.

Respecto al otro obstáculo, las dudas que puedan tener las autoridades de Competencia sobre los efectos que en la oferta y los precios pueda plantear la operación, el presidente de Iberia ha explicado que aunque “no hay propuesta concreta, hay trabajo interno sobre cómo dar respuesta a las inquietudes que planteó la Comisión Europea la vez anterior”. Bruselas consideraba que la concentración de ambas aerolíneas, tal y como se diseñó originariamente, reduciría la oferta en setenta pares de ciudades de origen y destino dentro de España y hacia o desde este país, entre las que ambas compañías aéreas ofrecen servicios directos, sobre todo con Estados Unidos y Latinoamérica.

Buen año

Javier Sánchez Prieto ha hecho estas consideraciones en un encuentro en el que ha resaltado que 2022 ha sido “el año de la recuperación y el empleo” en Iberia. También, ha añadido, el de la paz social con la firma del último convenio con los tripulantes de cabina -antes lo había hecho con los pilotos y el personal de tierra-, lo que permite a la aerolínea afrontar el futuro con optimismo.

Desde el punto de visto operativo, el presidente de Iberia ha destacado que la aerolínea ha tenido un desempeño muy satisfactorio. La aerolínea ha recuperado ya el 95% de su capacidad y en el tercer trimestre ha estado incluso cerca de igualar los resultados de 2019 tras ganar 246 millones de euros, sólo 27 menos que antes de la pandemia; e incrementar sus ventas un 3%, hasta los 1.635 millones de euros. “Los últimos dos trimestres han sido más sólidos, de vuelta a la recuperación. En el cuarto esperamos que siga la senda de resultados positivos. Las previsiones para 2022 son de resultados positivos en todas las líneas de negocio”, ha asegurado.

El presidente de Iberia se ha mostrado optimista también respecto al año próximo porque “pese a incertidumbre, la demanda es muy fuerte en todos los mercados, sobre todo en largo radio (Latinoamérica y Estados Unidos)” y sólo le quedaría por recuperar Asia, afectado por el conflicto de Ucrania. “El contexto macro está mejorando poco a poco. Las cosas están volviendo a su cauce”, según ha resumido.

En cuanto a los precios que puedan venir en 2023, Sánchez-Prieto ha asegurado que el sector aéreo es muy competitivo, aunque también ha admitido que en un contexto de subida de costes, “tus precios suben porque los márgenes de la industria son muy estrechos”. De igual forma, se ha mostrado seguro de que “si los costes de nuestros principales insumos bajan, los precios se ajustarán a la baja”. Lo que, ha advertido, no ayudaría a estos precios es la aplicación de algún tipo de impuesto para fomentar la descarbonización del sector. En su opinión, una tasa de ese tipo sólo haría caer la demanda y las inversiones y no conseguiría un objetivo en el que, según ha dicho, la industria está comprometida.