Mariló Montero se corona como la reina de Fin de Año

Este año Televisión Española se lo puso fácil aCristina Pedrochepara ser la reina de la noche. Retirada Anne Igartiburu del balcón de la cadena pública, el regreso de Ana Obregón, acompañada de Los Morancos no levantó la misma expectación que el poder ver a Pedroche, embarazada, con su nuevo vestido, una sorpresa que ya se ha convertido en una tradición más de Nochevieja, como lo es el carillón o las uvas. Lo que nadie se podía esperar es que en Mediaset iba a haber una invitada inesperada a esta contienda.

Mariló Montero llegó hace unos meses a «Todo es mentira» para hacer una suplencia y parece que está empezando a reivindicar un espacio propio en Mediaset. Sobre todo tras lo comentado que ha sido su elección para presentar las Campanadas desde Torrejón de Ardoz. Si bien todo el mundo conectaba con Antena 3 para comprobar cómo era el nuevo diseño de la vallecana –que ahora abordaremos–, fue difícil quitar los ojos de la pantalla cuando vimos aparecer a la presentadora navarra con un dos piezas con el que se convirtió en la mujer más elegante de la última noche del año. El diseño lo firmaba Atelier Pronovias, la línea más exclusiva de la compañía catalana, y constaba de una elegante blusa blanca escotada con botones de Swarovski y una voluminosa falda azul con fajín. El look, muy en la línea de las elegantes mujeres que creó Carolina Herrera durante su carrera, resultó todo un acierto que elevó enteros la arriesgada apuesta de Mediaset.

A Cristina Pedroche hay que agradecerle este año que supiera emplear la ropa para concienciar a toda la sociedad y, conociendo la expectación que levanta lo que se pone la de Vallecas el 31 de diciembre, está claro que ese mensaje calará en la sociedad antes o después. Una vez se desprendió de la tienda de campaña de ACNUR, que empleó como capa, pudimos ver un diseño que poco dejaba a la imaginación y que le permitía lucir tripa. Una paloma de yeso, de Jacinto de Manuel, le abrazaba el pecho, mientras una falda de tul en espiral, de Iñigo Garaizabal, enmarcaba su barriga, dejando adivinar su embarazo.

Inspiración años 50

Por su parte, Ana Obregón se presentó en TVE vestida de blanco, el color que está reclamando como su clásico para esta noche. Se trataba de un diseño de Rubén Hernández de inspiración años 50, con bordados de hilo de seda y cristales de Swarovski, con un pronunciado escote y una cola recogida en el lado izquierdo de la cadera. Lucía joyas de Rabat, además de un collar con el nombre de su hijo, Aless. A Obregón le acompañaron en esta tarea el duo Los Morancos, que aparecieron elegantísimos con un esmoquin de tres piezas y sendas pajaritas de terciopelo. Ellos fueron también de lo mejor de la noche.

En La Sexta, Cristina Pardo apostó por un diseño en lentejuelas verdes de Alejandro de Miguel, mientras su compañero, Dani Mateo, rendía un homenaje a Freddy Mercury.

En Twitch, Anne Igartiburu le fue infiel a Lorenzo Caprile, apostando por el mismo diseñador de Pardo. El que siguió la tradición fue Ramón García, que recurrió a su ya clásica (e icónica) capa española. Hay cosas que nunca cambian.

Expectación extra: Pedroche no defrauda

Este año Cristina Pedroche contaba con un aliciente más para congregar a la audiencia delante del televisor. Los rumores de su posible separación del chef Dabiz Muñoz quedaban descartados de un plumazo al anunciar, y visibilizar, su embarazo.

Además, la vallecana aprovechaba para reivindicar la situación de los refugiados, sacando un tema «incómodo» en un fin de fiesta. La paloma de la paz en la que se transformó segundos antes de las doce campanadas la encumbraron como la diosa de la noche con uno de los diseños que menos polémica ha levantado y, posiblemente, de los más interesantes que ha lucido.