Caso Epstein

El príncipe Andrés le dijo a Virginia Giuffre "mis hijas son un poco más jóvenes que tú" antes de tener relaciones

La autobiografía póstuma de Virginia Giuffre reabre las heridas del escándalo que hundió la reputación del duque de York. En Nobody’s Girl, la mujer detalla su primer encuentro con Andrés y describe un relato tan perturbador como devastador

Virginia Roberts fotografiada con el príncipe Andrés y Ghislaine Maxwell
Virginia Roberts fotografiada con el príncipe Andrés y Ghislaine Maxwelllarazon

Han pasado más de dos décadas desde aquella noche en Londres, pero el eco de las acusaciones sigue resonando en Buckingham. El príncipe Andrés, duque de York y tercer hijo de la reina Isabel II, vuelve a ocupar titulares tras la publicación de Nobody’s Girl, las memorias póstumas de Virginia Giuffre,la mujer que lo acusó de haber mantenido relaciones sexuales con ella cuando tenía solo 17 años.

El libro, editado por Alfred A. Knopf y divulgado parcialmente por The Guardian, ofrece un retrato estremecedor de los años en que Giuffre fue víctima de la red de tráfico sexual del financiero Jeffrey Epstein y su socia Ghislaine Maxwell. En uno de los capítulos más explosivos, Virginia relata el encuentro que, según ella, mantuvo con el príncipe en marzo de 2001, tras ser presentada en la casa londinense de Maxwell.

Un "apuesto príncipe"

"Mis hijas son un poco menores que tú", habría dicho el duque de York aquella noche, después de acertar su edad en un juego propuesto por los presentes para romper el hielo. Giuffre recuerda haberse sentido "como Cenicienta", invitada a conocer a un "apuesto príncipe" sin saber que, según su relato, esa velada acabaría convirtiéndose en una pesadilla.

Virginia Giuffre
Virginia GiuffreGtres

La joven asegura que, tras cenar y asistir juntos al club Tramp, fue instruida por Maxwell: "Cuando lleguemos a casa, deberás hacer por él lo que haces por Jeffrey". En su testimonio, Giuffre describe un encuentro en el que el príncipe se mostró "amable, pero con un aire de derecho", y narra detalles íntimos que, según ella, confirmaron la naturaleza abusiva de la relación. Andrews, por su parte, ha negado rotundamente haberla conocido y sostiene que la famosa fotografía en la que aparecen juntos es falsa.

El duque evitó enfrentarse a juicio en 2022 tras llegar a un acuerdo extrajudicial millonario, estimado en unas 12 millones de libras, sin admitir culpabilidad. Sin embargo, las nuevas revelaciones reavivan las dudas sobre la veracidad de su defensa. El libro incluye declaraciones inéditas sobre cómo Maxwell habría felicitado a Virginia tras el encuentro: "Lo hiciste bien, el Príncipe se divirtió".

Más allá del escándalo, las memorias de Giuffre son también un retrato descarnado de supervivencia. Nacida en California en 1983, su infancia estuvo marcada por el abuso, la huida y la explotación. A los 16 años, mientras trabajaba en el club Mar-a-Lago de Donald Trump, conoció a Maxwell, quien le ofreció un supuesto trabajo como masajista. Desde entonces, quedó atrapada en el entramado de poder, dinero y silencio que rodeaba a Epstein.

 Donald Trump con Jeffrey Epstein
Donald Trump con Jeffrey EpsteinRedes socialesRedes sociales

Su muerte, ocurrida hace seis meses en su granja de Australia, ha teñido de tragedia la publicación de su historia. Según fuentes cercanas, la madre de tres hijos llevaba años luchando contra las secuelas emocionales de su pasado y dedicaba su vida a defender a otras víctimas de abusos.

En el Reino Unido, el impacto de Nobody’s Girl amenaza con reabrir un capítulo que la Casa Real daba por cerrado. El príncipe Andrés, apartado de los deberes oficiales desde 2019, vive en un exilio silencioso en Windsor, sostenido por la sombra de un nombre que, para muchos, jamás podrá limpiar del todo.

En sus páginas finales, Giuffre escribe: "Durante años intentaron silenciarme. Hoy mi voz es lo único que me pertenece". Una frase que, más allá del escándalo, resuena como un epitafio de justicia para una mujer cuya verdad sigue incomodando a las más altas esferas del poder.